Parlamento de Irán aprueba cierre del estrecho de Ormuz, pide a Gobierno concretar la decisión

Por:Salim Fazal Ahmed Hussain | Corresponsal – Doha, Qatar
Fecha:
22 de junio de 2025
El Parlamento de Irán aprobó este domingo el cierre del estrecho de Ormuz, una estratégica vía marítima por donde transita aproximadamente el 20 % del petróleo que se consume en el mundo. La propuesta fue respaldada por el general Esmaeil Kowsari, miembro del Comité de Seguridad del Parlamento, quien aseguró a la televisión estatal Press TV que el legislativo ha alcanzado un “consenso” sobre la medida.
Sin embargo, la fuente no precisó si la moción fue adoptada por todo el Parlamento o únicamente por el comité al que pertenece Kowsari. En cualquier caso, el cierre del estrecho deberá ser aprobado por el Consejo Supremo de Seguridad Nacional de Irán, integrado por el presidente Masud Pezeshkian, varios ministros, representantes del líder supremo y miembros de las fuerzas de seguridad del país.
El estrecho de Ormuz, situado entre el Golfo Pérsico y el Golfo de Omán, es un punto neurálgico del comercio energético global. En su parte más angosta tiene solo 54 kilómetros de ancho, pero por él transitan diariamente unos 13 buques cisterna que transportan más de 15 millones de barriles de crudo, así como grandes cantidades de gas natural.
El interés geopolítico en esta zona ha aumentado en las últimas semanas debido a la intensificación del conflicto entre Irán e Israel, y ahora también con Estados Unidos, tras los recientes bombardeos israelíes contra infraestructura iraní.
Durante años, Irán ha amenazado con cerrar el estrecho como respuesta a sanciones impuestas por Estados Unidos, principalmente en torno a su programa nuclear. Aunque estas advertencias no se han materializado, el área ha sido escenario de múltiples incidentes, incluidos ataques y confiscaciones de embarcaciones, lo que ha elevado la tensión en la región.
La confrontación se remonta a 2018, cuando la Unión Americana se retiró del acuerdo nuclear con Irán firmado en 2015, acusando a Teherán de incumplir sus compromisos. La situación se agravó en 2019 con la imposición de sanciones más severas a la exportación de petróleo iraní, provocando nuevas amenazas de cerrar el paso marítimo.
Como respuesta estratégica, Irán inauguró en 2021 una terminal petrolera en el mar de Omán, en la ciudad de Jask, lo que permitió exportar crudo sin necesidad de pasar por el estrecho de Ormuz. Este proyecto incluyó un oleoducto de mil kilómetros desde el campo petrolífero de Goreh, con capacidad inicial para transportar 300 mil barriles diarios, cifra que podría crecer hasta un millón.